Nosotros

Me he sentado esta noche en el balcón, para ver la formidable tormenta eléctrica que se cernía sobre Pamplona. Es un espectáculo impresionante. Sobre todo si lo ves con el contraste que ofrece la luna, en el otro lado, al oeste, brillando en cuarto creciente, casi llena. En fin, que tenía el cielo dividido, la mitad con un montón de nubes que se iluminaban intermitentemente, y la otra mitad, casi sin nubes, con una luna maravillosa.
Y esto me ha llevado a pensar en nosotros, en nuestra pequeñez.

Nos asombran las cosas grandes, pero no sé si es por bonitas o por grandes. Nos sorprendemos con las cosas pequeñas, pero no sé si es por bonitas o por pequeñas. Todo lo que se sale de nuestra normalidad nos resulta admirable. Pero existe incluso antes que nosotros. Nos sorprendemos por causa de nuestra ignorancia, de nuestra falta de relatividad, por nuestra autosatisfacción y conformismo. Creemos que lo controlamos todo, y solo controlamos nuestros esfínteres, y no siempre.

No somos capaces de darnos cuenta de que somos una trillonésima, o menos, parte, de algo enorme que no controlamos. De que estamos de paso y que somos efímeros. Una mosca, en nuestra vida, vive mucho comparado con nuestra existencia en el universo.

Y ésto estrecha el paréntesis, el nacimiento y la muerte. Poco tiempo, del nuestro, y generalmente desperdiciado. Nos volvemos locos llenando nuestra vida de satisfacciones efímeras, de logros materiales que no trascienden al minuto de conseguirlos. Y así nos va. Si el supermercado en el que hemos convertido nuestra sociedad no proporciona las ofertas deseadas nos venimos abajo, el sistema no funciona.

Admiramos los éxitos sociales, y elegimos a las personas que creemos que nos los pueden proporcionar. Y aquí me puedo meter en el gran tema, la educación. Ni lo voy a intentar. Es la madre del cordero. O cambiamos los paradigmas educativos, o no tenemos futuro como personas. Tendremos futuro como organismos vivos, dirigidos, manipulados, anulados en nuestra voluntad, pero cómodamente mantenidos. Pero no vivos completamente, solo en nuestra aspecto físico, y mínimamente en el intelectual. Pero hay otros.

Si mi vida solo está llena de razón, está vacía. Igual que si solo está llena de intuición, o de sentimientos. El equilibrio entre las tres componentes es la clave de una existencia plena. Y nos lo están poniendo muy difícil. La estructura social que hemos creado nos exige dedicar la mayor parte de nuestro tiempo a los aspectos materiales de nuestra vida. Y la satisfacción de las necesidades más intrínsecas del ser humano no se encuentran ahí.

No sé como pasar de ésto. Y me gustaría, pero me siento atrapado. Procuro compensar la obligación con las devociones mas personales y gratificantes, pero me preocupo.

Esperaré ver pasar otra tormenta para acercarme a la verdad.

4 pensamientos en “Nosotros

  1. Tus palabras me resuenan Charlipap. Hay párrafos en los me parece estar leyendo mis propios pensamientos. En otros sonrío porque me encanta la franqueza de tu expresión.
    Anoche yo vi más luna y menos tormenta que tú, me pilló paseando por un lugar muy especial, iluminado por cientos de velas. La belleza y la magia están por todas partes, esperando a que nos detengamos a mirar, el tiempo es corto para dejar que se nos escape.
    Un abrazo.

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  2. Lamentablemente no podrás pasar de ésto, pero te harás fuerte después de cada tormenta. La preocupación por el NOSOTROS no está valorada y es tremendamente dolorosa; has de compensarla con una pizca por el YO de cuando en cuando.
    ¡Equilibrio!
    Un abrazo

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  3. Una entrada que escribí hace tiempo iba de esta tema que has escrito, de lo que la sociedad nos transmite y de que al lado de la naturaleza no somos nada!

    Hay que tener cuidado con las tormentas, aunque sean espectaculares estaría bien que lo fueran sin hacer ningún daño ;). La Luna es mi preferida en el tema del Universo, así que me enamora escuchar o leer algo sobre ella!.

    Creo que nos quieren convertir en máquinas que dejemos de ser seres «humanos», que pensemos muy poco en lo que realmente importa y nos perdamos en lo que a «ellos» les hace ganar mucho poder, mucha riqueza, que es lo que les motiva, el dinero. Está claro que a la maldad sólo el dinero la descubre. Hay personas que son capaces de venderse por los billetes pero gracias a mi experiencia y teniendo en cuenta que me queda por aprender, siempre, sé que hay personas buenas que jamás antepondrán dinero a todo lo que es amor a todos los niveles, así que viva la gente honesta!!.

    SALUDOS CHARLIPAP!! 🙂 Y BUEN MARTES!!!

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